La distancia óptima de visualización al mirar un TV de 55" es de 1.69 m (5.5 ft).
La experiencia de visualización más envolvente se logra cuando la pantalla ocupa 40 grados de tu campo de visión.

Puedes medir la dimensión de un TV de 55" (138 cm) calculando la longitud diagonal, desde la esquina superior izquierda hasta la esquina inferior derecha.

La tecnología HDR (Alto Rango Dinámico) ajusta los niveles de luz para producir imágenes con mayores niveles de contraste y una gama de colores más amplia en comparación con los televisores estándar, lo que da como resultado imágenes de aspecto más realista. Los televisores compatibles con HDR también son excelentes para los jugadores que necesitan ubicar objetivos en áreas más oscuras de la pantalla, ya que HDR puede crear un contraste alto entre las áreas claras y oscuras.

Resolución es un término que describe la densidad en la que estos puntos minúsculos, conocidos como píxeles, se disponen en la pantalla. Estos píxeles individuales se unen para formar la imagen que es visible en la pantalla. Como resultado, un mayor recuento de píxeles se correlaciona directamente con una resolución más alta, lo que produce una imagen más clara y detallada.
Los televisores de 55" se ofrecen en resoluciones 4K y 8K. La versión 4K cuenta con una resolución de 3840 x 2160 píxeles para un alto nivel de detalle y nitidez de imagen. La versión 8K proporciona aún más detalle y nitidez gracias a la resolución de 7680 x 4320 píxeles, es decir, cuatro veces la cantidad de píxeles que en un TV 4K. Con esta resolución ultra alta, es posible mostrar imágenes mucho más definidas y detalladas.

El TV QN90 Neo QLED de 55" es la opción óptima para juegos, gracias a su compatibilidad con resolución 4K y el Game Mode. Proporciona una experiencia de juego envolvente con funciones como Motion Xcelerator Turbo Pro a una frecuencia de actualización fluida de 144 Hz, baja demora de entrada, FreeSync Premium Pro y 4 puertos HDMI 2.1 para una conectividad perfecta.

Al instalar tu TV, puedes elegir entre usar un soporte o un montaje de pared. Si optas por un soporte, es importante considerar su diseño y dimensiones, así como dónde planeas colocar tu TV. Por otro lado, si decides usar un montaje de pared, asegúrate de tener en cuenta el tamaño, el peso y los ángulos de visión de tu TV. Un montaje de pared permite colocar el TV al ras con la pared, lo que le da a tu espacio una apariencia elegante y pulcra.