Más espacio para comidas saludables
Toda la capacidad que necesitas para preparar comidas sanas para tu familia y amigos.
Mejora la capacidad de almacenamiento de tu frigorífico. No importa que estés cocinando, tendrás a mano todos tus ingredientes favoritos.
Prepara algo nuevo
Usar sobrantes de comidas como ingrediente principal es una forma genial de crear algo delicioso. Aquí tienes unas sencillas ideas para inspirarte:
- Sopa de verduras: Añade a una olla algo de carne, verduras, fideos, legumbre y otras sobras que tengas en tu frigorífico. Agrega un poco de caldo y especias, llévalo a ebullición y tu sopa estará lista para servirse.
- Vacía tu frigorífico haciendo una tortilla: Utiliza las verduras que tengas a mano y mézclalas con huevos y leche para preparar una tortilla deliciosa.
Utiliza tu congelador
Congelar las sobras no solo te permite conservar tu comida por más tiempo, es también una forma inteligente de reducir los desperdicios. Esta es la forma correcta de hacerlo:
Congela la comida a -18ºC o menos para mantener el sabor, la textura y los nutrientes.
Separa los platos en porciones antes de congelarlos, ya que una vez descongelas comida no puedes volver a congelarla.
Para impedir que crezcan las bacterias, descongela la comida congelada en el frigorífico, donde permanecerá a una temperatura constante. Deja que se descongele durante 5 horas por kilo.
Además, la tecnología SpaceMax™ de los frigoríficos Samsung te permitirá almacenar más comida sin aumentar las dimensiones externas o comprometer la eficiencia energética.
Dale sabor a tu día
Los encurtidos agregan un sabor extra a todo tipo de alimentos, desde verduras hasta hamburguesas. Colócalos en el frigorífico después de la preparación y estarán listos para comer al día siguiente.
Simplemente llena una jarra con pepinos en rodajas, cebollas, pimienta y ramitas de eneldo. Calienta vinagre, agua, especias y ajo en un recipiente separado. Disuelve sal y azúcar. Déjalo enfriar y vierte esta mezcla en la jarra. Cierra la tapa y mételo en el frigorífico 24 horas antes de su consumo. Puedes guardar los encurtidos en el frigorífico hasta 3 meses.
Mezcla harina, azúcar, cacao, sal y canela en una taza de cerámica.
Añade aceite vegetal, agua y extracto de vainilla. Remueve hasta que quede homogéneo.
Mete la taza en el microondas con temperatura alta durante 1 minuto.